Contribuir desde el Laboratorio de Paz del Magdalena Medio a elevar garantías de protección de los derechos humanos y generar acuerdos concertados sobre los problemas estratégicos en los “espacios humanitarios del Carare Opón”, de manera que se puedan fortalecer en ellos el tejido social, la formación de sujetos de derecho y su constitución como territorios de autodeterminación, defensa de la vida y desarrollo con equidad.